El oro comenzó la semana con una fuerte caída de más de 11 dólares, que hacían que el oro nuevamente se colocara debajo de la barrera de los 1200 dólares la onza.

El oro el viernes subía a 1,209.05 dólares la onza, mas temprano ese día alcanzó los 1,213.35 dólares la onza, su mayor nivel desde el lunes de esta semana, el 5 de julio. El contrato del oro para entrega en agosto descendió 11.10 dólares, o 0.9 %, para cerrar en 1198.80 dólares la onza, en el mismo mercado, el contrato de la plata para entrega en septiembre descendió 15.6 centavos de dólar, o 0.9 %, para cerrar en 17.917 dólares la onza. El cobre al igual seguía la tendencia de los metales durante la sesión con lo cual también registró bajas.

Aunque en lo que va del año el oro alcanzó un récord de 1266.50 dólares el 21 de junio, debido a que los inversionistas buscaban refugio en el oro, cuando Grecia anunciaba que estaba en crisis al declarar que era incapaz de pagar una deuda, la cual al final si pudo pagar con ayuda de un préstamo otorgado por el FMI ascendente a 110 000 millones de euros.

El oro aun sigue siendo un atractivo pese a estas sesiones adversas a la baja, puesto que aun la situación en la zona euro no se encuentra estable, con lo que el oro seguirá siendo un refugio hasta que se alivie la tensión en Europa, pues según los analistas por lo menos hasta finales de este año la situación seguirá siendo con altas y bajas para el oro, la mayoría de altas, con lo que esta semana volvió a recuperar el terreno perdido de las sesiones anteriores.