Durante el evento, que reúne a delegados de 22 países, se destacó que la actividad informal cubre hoy casi a toda Latinoamérica y el Caribe. Mientras en países como Colombia y Perú el 50% de las unidades de negocios son informales, en algunas naciones caribeñas pueden ser hasta el 92%.

Julián Domínguez, el presidente de la Cámara de Comercio de Cali, resaltó que “se debe trabajar con ahínco para reducir esos niveles de informalidad, que en América Latina son del orden del 57% de la actividad económica, lo cual constituye un fenómeno que afecta nuestra competitividad”.

Resaltó que en virtud del Programa de Rutas Empresariales, 8.658 empresas han salido de la informalidad en Colombia durante el último año. 3.000 de ellas están ubicadas en Cali, pero aún faltan unas 27.000. Michael Penfold, director de Políticas Públicas y Competitividad de la Corporación Andina de Fomento, CAF, indicó que “América Latina ha logrado avances económicos y sociales”, “Muchos gerentes se la pasan más gestionando permisos ante las alcaldías y gobiernos regionales, que produciendo otros resultados”.

Según el presidente de la Asociación Iberoamericana de Cámaras de Comercio, Aico, Ambrosio Bertolotti, es necesario que haya una reestructuración de esas estrategias para que el sector privado pueda aumentar sus inversiones y la creación de más empleos. “La tarea de los gobiernos, cualquiera que sea su ideología, es apoyar al sector empresarial privado. Y para ello debemos crear normas tributarias que no ahoguen a las empresas, que alienten la formación de unidades de negocios e impulsen la inversión”, enfatizó.