La Comisión Europea desmintió la versión de algunos lideres europeos que consideraban que las acciones tomadas son ataques especulativos contra la moneda única, ya que se esta demorando en estabilizar la situación de la zona euro, además de los altos costos de financiamiento.

Así el presidente de la Comisión europea, José Manual Barroso, declaro que no cree posible una conspiración contra el euro, indicando que la depreciación observada en las últimas semanas se debe a los altos índices de déficit mostrados por algunos países de la Unión europea. Barroso dijo: "no creo en una conspiración contra el euro". "Hay un ataque sobre la deuda soberana de ciertos países que tiene que ser enfrentada con gran determinación", afirmó. "Estamos en uno de los momentos más críticos en el proceso de construcción de Europa, es cierto de que hay serios riesgos económicos y sociales, riesgos de populismo y derrotismo, pero creo que Europa los va a superar", dijo Barroso.

Aunque admitió que las medidas tomaran su tiempo, pues aun los países miembros del eurogrupo se encuentran instalando las medidas acordadas el pasado 9 de mayo, puesto que junto con el fondo de rescate aprobado por 750 000 euros, se aprobó un plan para disminuir el déficit económico de los países europeos.

Dichas medidas consideran que se deben aplicar medidas de austeridad y reformas económicas con la finalidad de que se reduzca el déficit, aunque se admitió que los países con mayores registros de déficit económico son los que aplicaran medidas mas fuertes en cuanto a estas reformas.